Javier Ledo, detenido como principal sospechoso por el asesinato de Paz Fernández, fue condenado hoy a 9 meses por incumplir una orden de alejamiento de otra mujer a la que había agredido. Parece que su historial de agresiones a mujeres ya era largo cuando presuntamente mato a su ultima victima. Pero seguro que es una persona con grandes posibilidades de rehabilitación.
Obviamente todo el mundo, criminales o no, tienen derechos inalienables, pero la sociedad tiene que tener posibilidad de defenderse. Hay personas con tal grado de maldad que siempre van a suponer un peligro para los demás. Y evidentemente el daño hecho a las victimas no tiene rehabilitacion posible, pero que el sistema se vuelque hacia la protección de sus asesinos es añadir insulto a la injuria.
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