Un año mas nos dimos una vuelta por la Feria de Muestras, cita obligada del verano en Gijón. No podía faltar el bocata de calamares y el sandwinch de San Martin, aunque en los últimos tiempos venimos añadiendo un vermut de La Paloma, por aquello de la multiculturalidad. Aprovechamos para ver algunas cosas serias que teníamos pendientes y compramos alguna pijada para dar color. Como siempre lo mejor es el stand de Tudela-Veguin este año dedicado a los bodegones. Justo es decir que este año el Ayuntamiento de Gijón no lo hizo nada mal dedicando su espacio a la historia romana de Gijón, allí puede verse lo que los romanos han hecho por nosotros por si alguien tiene interés, claro que este año ni nos molestamos en ver el del Principado de Asturias, después de padecer sus fiascos de ediciones anteriores. El año que viene volveremos y volveremos a decir que es lo mismo de todos los años.
1 comentarios:
Este año no fui pero no habría perdonado el bocata de calamares y la pintura. Todos decimos que es todos los años lo mismo, y realmente poco puede cambiar de un año a otro pero si vamos cada cinco años, ya lo creo que observamos cambios.
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