Hoy este blog cumple sus primeros dos años de existencia, la verdad es que no creía que fuese a durar tanto.
Cuando Ana me lo propuso tardé en decidirme porque eso de Internet no era uno de mis fuertes, especialmente por aquel entonces. Lo mío era más reflexionar discretamente que divulgar mis pensamientos a los cuatro vientos. Pero me atreví y la experiencia de sumergirme en Internet fue y sigue siendo fantástica, se me abrió la posibilidad de aportar mis opiniones (siempre de vía estrecha) en un mundo que me era extraño y cada día me resulta más familiar. Una herramienta para la comunicación sin trabas ni censuras y al alcance de mucha gente; una herramienta que yo no sólo sirve para difundir opiniones sino, cada vez más, para crearlas. Un medio excepcional para hacer contactos y conocer nuevas realidades.
Sé que últimamente ando un poco vago escribiendo en mi blog y leyendo los de otros, pero prometo retomar una intensa actividad bloguera en breve. Ahora dedico parte de mi tiempo internetero a Facebook, lo que no está mal, pero lo cierto es que el blog me exige pensar las cosas con un poco más de calma y eso siempre vale la pena.
A ver si el año que viene, en el tercer aniversario, os cuento que (por fin) me metí con el twitter y hasta abrí un canal en Youtube... o alguna otra cosa nueva que haya surgido. Eso sí, tengo pensado renovar el contrato de asistencia técnica con mi sobrino Javier que ha sido un soporte fundamental en esta aventura. También quiero aprovechar para agradecer su presencia a toda la gente conocida o casi "desconocida" con quien mantengo contacto a través del blog, un millón de gracias por vuestros comentarios que sabéis muy bien cuanto se agradecen