
Muchos socialistas teníamos la esperanza de que esta nueva derrota electoral pudiese servir de revulsivo a una dirección que parecía no haberse dado cuenta todavía de cual era la situacion real por la que atraviesa el PSOE, limitándose a atecharse hasta que escampe y el bipartidismo vuelva a obrar su magia.
Vana esperanza, Rubalcaba acaba de anunciar que su solución a nuestros males políticos es la convocatoria de un Congreso Extraordinario a mediados de julio. Cualquiera que tenga algún leve conocimiento sobre el funcionamiento del partido podrá rellenar sin problemas la parte que no se dice explícitamente: en ese Congreso participarán...