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lunes, 2 de junio de 2014

Bicicletas en zonas peatonales



A punto de llegar el verano uno se acuerda de aquello de que "Las bicicletas son para el verano" y espera temeroso los nuevos riesgos que le esperan por aceras, paseos y parques.

Hace unos días pudimos "disfrutar" de un anticipo al pasar por los jardines que hay entre el Museo del Ferrocarril y la Plaza del Padre Máximo, donde nos cruzamos con tres mastuerzos en bicicleta. Dos, por lo menos, tenían la decencia inicial de circular por el carril bici que corta por la mitad esos jardines, pero el tercero zigzagueaba alegremente por el pequeño paso reservado a los peatones: cuatro carriles de calzada y un carril bici no eran suficientes para tan heroico defensor de las ciudades sostenibles y la vida saludable, necesitó apropiarse del camino peatonal. Harto de soportar continuamente en Gijón situaciones similares no pude evitar exclamar "manda carayo ¿por qué no vas por el carril bici?". Eso provocó que los tres nos lanzasen una avalancha de insultos y amenazas con tal nivel de violencia que sinceramente temimos ser agredidos.

Así que ya lo saben los peatones gijoneses cuando se encuentren en el mismo caso: si un ciclista viene hacia ellos por una zona peatonal lo que deben hacer es apartarse rauda y discretamente en silencio, de lo contrario añadirán al riesgo de ser atropellados la posibilidad de que los insulten o les parten la cara a hostias. Eso si, en nombre de la salud, la sostenibilidad y la ecología.

Manda carayo.

1 comentarios:

Siempre me llamó la atencion que los ciclistas, que tanto protestan frente al coche, cuando toman la acera cambian las tornas y asaltan al pobre peatón que sale del portal con riesgo de ser afeitado en seco por los intrépidos ciclistas.