Vaya por delante que no soy fan de Woody Allen, la verdad es que ni siquiera me cae bien, pero el asunto de la estatua es de una estupidez difícil de ignorar. Woody Allen fue acusado hace años por su despechada ex, acusado ni más ni menos de abusar de su hija común, la acusación fue investigada por todo un ejército de expertos que no vieron visos de tales abusos, de todas formas las acusaciones nunca cesaron. Es curioso notar que de los numerosos hijos Mía Farrow (la exdepechada) sólo uno apoya las acusaciones de la madre e hija, mientras otro acusa a su madre de ser una maltratadora, manipuladora y mentirosa compulsiva que inventó toda la historia para vengarse de Allen, el mismo cuenta con pelos y señales los malos tratos físicos y psicológicos que sufrió a manos de Farrow, pero curiosamente a su historia no se le da proyección que tiene la de su madre. La historia andaba flotando más o menos por ahí hasta apareció #Metoo y madre e hija vieron una ocasión de oro para desempolvar sus acusaciones. Naturalmente fueron entusiasticamente creidas por las seguidoras de este movimiento, a quienes importó muy poco la investigación previa, la presunción de inocencia, los debidos procedimientos judiciales y hasta el sentido común. Por supuesto nuestras feministas regionales no perdieron el tiempo y apuntaron rápidamente al linchamiento exigiendo que fuese derribada la estatua que conmemora el Premio Príncipe de Asturias al cineasta. Parece ser que ahora no podrán erigirse estatuas de nadie que no pase los estrictos test de pureza de nuestros nuevos inquisidores, independientemente del motivo por el que esa estatua se haya eregido, en el caso de Allen por su carrera cinematográfica, no como padre del año.
Y hablando de nuevos inquisidores es curioso que haya tantos problemas con Woody Allen pero ninguno con el inquisidor propiamente dicho, parece que la estatua de Valdés Salas no genera ningún problema a sus discípulos actuale
1 comentarios:
"Woody Allen es una persona miserable que no se merece estar en esta ciudad"
"Si retiran la estatua de ese depravado será un triunfo del feminismo" Eva Irazu | Portavoz de la Plataforma Feminista de Asturias.
Esto ya pasa de caza de brujas, ya pasa de McCarthyismo, ya es pura locura. Da lo mismo que hubiese una investigacion, da lo mismo que no se encontrara indicios de abusos...como hay una acusación hay condena inmediata por la partida de linchamiento ¿No somos conscientes de que estamos poniendo en peligro derechos libertades que consiguió mucho conseguir? Afortunadamente esto no es el salvaje oeste y esperemos que siga sin serlo por mucho tiempo,
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